Frenadeso Noticias (FRENTE NACIONAL POR LA DEFENSA DE LOS DERECHOS ECONOMICOS Y SOCIALES PANAMÁ)

Demanda social urgente.

Articulo aparecido en la Estrella de Panama el domingo 5 de junio de 2011

El miércoles 8 de junio, Marcos Andrade, directivo de CONUSI-SUNTRACS hablará por el movimiento sindical panameño en la 100ª Conferencia Internacional del Trabajo de la OIT.

La semana pasada obreros y economistas nos sentamos a analizar la situación del llamado ‘mercado laboral’ panameño. Explicábamos a los economistas las situación de deterioro de las condiciones laborales (salario, informalidad, estabilidad laboral, riesgos profesionales, entre otros), ellos expusieron las cifras.

El resultado, revelaba lo que a diario siente la gente cuando sale de los supermercados, ‘pagamos más y cada vez llevamos menos productos’. ¿Qué explica esta situación? Además de la estructura oligopólica y la especulación de los empresarios al definir los precios, por el lado de los consumidores las remuneraciones salariales son extremadamente bajas.

Las cifras oficiales, indican que 49 de cada cien personas empleadas (aproximadamente medio millón de trabajadores) devengan un salario mensual de 400.00 balboas o menos, el cual no permite cubrir el costo de la canasta básica familiar (alimentación y otros gastos necesarios). Igualmente, tres de cada diez personas ocupadas se encuentran en situación de pobreza total y aproximadamente una de cada diez es extremadamente pobre.

Sobre este particular, la OIT ha expresado que en Panamá ‘la política salarial del sector privado está edificada sobre salarios mínimos, que sólo cubre a los trabajadores empleados en el sector formal, por tanto, la revisión y aumento de los salarios mínimos se hace indispensable, obligante’.

Por otro lado, el principio constitucional que señala que el salario o sueldo mínimo del trabajador debe cubrir las necesidades normales del trabajador y su familia, y mejorar su nivel de vida es letra muerta. Los diversos gobiernos (cd, panameñistas, prd), no han hecho cumplir la normativa; por el contrario, sus esfuerzos están encaminados a preservar los intereses de la clase social a la que representan.

La revisión de salarios mínimos tampoco ha sido frecuente como lo establece la normativa (cada dos años), es a partir del 2001 que podemos establecer una periodicidad más o menos constante. Entre 1983 y 1992 no se realizaron revisiones de salarios mínimos. De 1992 a 1997 solo se dieron tres revisiones de salarios mínimos (en promedio uno cada cinco años), a partir de 1998 y hasta 2009, se dieron siete revisiones (a razón de una cada dos años).

En lo que respecta al salario general, desde 1981 (Ley 13) no se realiza un aumento general de salario, lo que hace, que la tendencia sea a que cada vez más trabajadores laboren por el mínimo salarial y que trabajadores de más años de servicios terminen siendo remunerado con el mismo nivel de quienes ingresan al campo laboral. En términos de los defensores del mercado, esto termina siendo una distorsión o falla del mercado, que hace que el Estado tenga que intervenir.

Mientras tanto, el poder de compra de los salarios se pierde ante la escalada inflacionista, el aumento del costo de vida, la mayor carga impositiva y el deterioro de los servicios sociales de salud, que obligan a la población a tener que acudir al servicio privado.

Esta radiografía nos permite plantear que la demanda social urgente del pueblo panameño gira en torno al aumento, no solo del salario mínimo sino de aumento general de salarios, y la ejecución de una política de disminución, congelamiento y control de precios de los bienes y servicios básicos.

Este lunes inicia el trabajo de la Comisión Nacional de Salario Mínimo. Los empresarios, como es habitual, defenderán su interés, no de obtener ganancias sino la mayor ganancia; los obreros por nuestra parte defenderemos el derecho a un salario que permita propender a una vida digna.

Ante el estado de pauperización de las condiciones materiales de vida del pueblo panameño y la perversa distribución de la riqueza, nos asiste el derecho a expresarnos en todas las vías necesarias, en la mesa de revisión de salario con nuestra propuesta técnica, en las calles para exigir una ruptura con el esquema que concentra la riqueza y los ingresos en cada vez menos personas.

Llamamos a los obreros y al pueblo a prepararnos para esta jornada de lucha por el derecho a la vida digna.

*SECRETARIO GENERAL DE CONUSI — FRENADESO.